Inocencia


Tonta estupidez, la que te cercena el alma,
pero ¿como saber que el volar de gaviotas, no es como te lo imaginabas?
¿Acaso no sabias? que Alicia sigue sola en su cuento,
del que nunca despertó y por el cual esta condenada a repetir la historia.
Sin olvidarme, recuerdo bien tu rostro de infantiles ideas de un lugar donde tú eras la princesa;
hermosos jardines se levantaban en tu reino y un ponderoso castillo que ahora llora tu soledad se erguía imponente al viento. ¿Cuantos sueños hoy hechos trozos,
como tu espíritu, han de vagar dispersos en el espacio sideral?
y la vida como irónica amiga te ve en el umbral del dolor y a colosales carcajadas se burla de tu gran e inocente estupidez.